Dato Práctico #38
Merengue: Si al hacer merengue, le cae un poco de yema al recipiente donde tiene las claras, sáquelo con un pedacito de miga de pan.
Dato Práctico #38
Merengue: Si al hacer merengue, le cae un poco de yema al recipiente donde tiene las claras, sáquelo con un pedacito de miga de pan.
Acompaña cualquier pescado con este delicioso gratinado de tomates y queso mozzarella sazonado con romero y aceite de oliva.
Prepara una fuente para horno, frotándole un diente de ajo, una cucharada de aceite de oliva y salpimentándola (1).
Pela los tomates y rebánalos en rodajas de medio centímetro y distribúyelos en la fuente por capas salpimentándolos (2).
Corta la mozzarella en rodajas, el pan -sin la corteza- rállalo y distribuye ambos sobre los tomates de manera homogénea (3), espolvoreando al final el romero picado. Rocía con un poco de aceite de oliva (4) y lleva al horno prealentado a 190ºC durante unos 30 minutos.
Sirve este gratinado caliente y disfruta junto a un sencillo pescado al horno.
Una forma rápida y limpia de pelar tomates es: hacerles, en la parte superior sobre la piel, una cruz con el cuchillo y dejarlos durante 1 minuto en agua hirviendo. Detener la cocción con agua muy fría y verás que la piel sale fácilmente.