Dato Práctico #72
Al pelar las papas, ten cuidado de no quitar mucha pulpa; esto no sólo es un desperdicio, sino también quita a la sopa la mejor parte, la más rica en vitaminas, que se encuentra inmediatamente bajo la cáscara.
Dato Práctico #72
Al pelar las papas, ten cuidado de no quitar mucha pulpa; esto no sólo es un desperdicio, sino también quita a la sopa la mejor parte, la más rica en vitaminas, que se encuentra inmediatamente bajo la cáscara.
Prueba esta sabrosa receta que combina la frescura del tomate con el sabor de la albahaca y el perejil con deliciosos mejillones.
Pela y corta en cubos los tomates, lava y pica en trozos pequeños la albahaca y el perejil, mezclando todo en una fuente (1). Salpimenta y añade el vinagre y el aceite mezclando todo (2).
Toma los mejillones, cocidos y sin sus conchas, y ponlos a marinar en la mezcla impregnándolos de ella (3). Tapa la fuente con papel film y déjalos reposar por 30 minutos. Sirve los mejillones en un plato hondo acompañados de pan blanco tostado (4) y una copa de vino blanco.
En algunos lugares de américa los mejillones son conocidos como choros, pero si no logras conseguirlos frescos, puedes comprar congelados aunque deberás esperar a que se descongelen y queden a temperatura ambiente antes de realizar la receta. También puedes reemplazarlos por almejas.