Dato Práctico #61
Si te invitan a comer, no insistas si la dueña de casa dice que no quiere ayuda. Las visitas no deben insistir, pues hay personas que sinceramente prefieren hacer las cosas solas.
Dato Práctico #61
Si te invitan a comer, no insistas si la dueña de casa dice que no quiere ayuda. Las visitas no deben insistir, pues hay personas que sinceramente prefieren hacer las cosas solas.
Prepara este sencillo risotto en casa y disfruta de un almuerzo exótico y delicioso con el toque del azafrán.
En una olla, calienta 50 grs. de mantequilla y en ella, fríe las pechugas de pollo cortadas en tiras finas y la cebolla picada en cubos pequeños durante 8 minutos o hasta que se doren (1).
Añade el arroz y revuelve rehogando durante 2 a 3 minutos (2). Finalmente, agrega el vino y sigue cocinando hasta que se reduzca el líquido (3).
Toma 4 cucharadas del caldo caliente y llévalas a una fuente. Luego remoja en ella las hebras de azafrán. Posteriormente, vierte ese caldo en el arroz y revuelve hasta que se absorva (4).
Continúa incorporando el resto del caldo con un cucharón poco a poco, esperando que se absorva una parte antes de agregar la otra, así hasta que tras unos 20 minutos se haya consumido todo el líquido y el arroz esté cremoso (5).
Retira el arroz del fuego y agrega el resto de la mantequilla. Agrega el queso parmesano rallado y deja que se funda con el arroz, salpimentando a gusto (6). Sirve en platos tibios.
Para esta receta es recomendable usar pechugas de pollo deshuesadas.