Dato Práctico #89
Diariamente, los seres humanos de actividad moderada deben consumir entre 2500 y 3000 calorías. Las mujeres necesitan una cantidad menor.
Dato Práctico #89
Diariamente, los seres humanos de actividad moderada deben consumir entre 2500 y 3000 calorías. Las mujeres necesitan una cantidad menor.
La torta de chocolate y almendras es una deliciosa opción para el postre y la hora del té. Su intenso sabor a chocolate no dejará a nadie indiferente.
Precalienta el horno a 180°C.
Toma una pizca de mantequilla y engrasa el molde. Luego, cúbrelo con el papel mantequilla o papel de alumnio. Asegúrate de cubrir la base y las orillas. Espolvorea un poco de harina dentro del molde. De esta forma, será más facil sacar el papel una vez terminada tu torta.
En un bowl, a baño María, derrite la mitad del chocolate. Asegúrate que la base del bowl no tenga contacto con la olla que lo contiene, la idea es que el chocolate se derrita por la acción del agua. Una vez que se derrita, deja enfriar.
En un bowl grande, mezcla el azúcar con 115 gr. de mantequilla. Una vez que esté todo bien mezclado, agrega -de a una- las yemas de los huevos y sigue revolviendo. Añade el chocolate derretido, las almendras molidas, la miga del pan blanco, los polvos de hornear, la esencia de almendra y el licor. Revuelve todo con una cuchara de metal.
En un bowl mediano, añade las claras de los huevos y revuélvelas con una batidora a punto nieve. Luego, incorpóralas a la mezcla del bowl grande.
Una vez que esté todo bien revuelto, procede a vaciar el conteniedo en el molde desmontable y hornea por 25 a 30 minutos. Una buena forma para saber si la torta está lista, es clavando un mondadientes en el centro. Tiene que salir limpio.
Una vez horneada, retira del molde y deja enfriar en una superficie lisa.
Para preparar la cobertura: En un bowl a baño María derrite la mantequilla y el chocolate que sobró. Espera a que se enfríe y luego, decora y cubre la parte superior de la torta.
Al momento de elegir el chocolate para esta receta, procura buscar uno de buena calidad. Es decir, que contenga al menos un 60% de cacao.