Dato Práctico #85
Para que una comida resulte cálida y acogedora, no debe jamás tener una lámpara encendida en la mesa. Eso da una luz frÃa. El comedor debe tener velas o apliques en la pared.
Dato Práctico #85
Para que una comida resulte cálida y acogedora, no debe jamás tener una lámpara encendida en la mesa. Eso da una luz frÃa. El comedor debe tener velas o apliques en la pared.
Procedentes de Italia, los Macaroons son un tipo de galleta ideal para aquellos que se inician en la repostería. Fáciles de preparar y deliciosos para acompañar una taza de café o té.
En un bowl grande, bate la clara de huevo con una batidora hasta que quede a punto de nieve. Agrega cuidadosamente el azúcar y revuelve hasta que logres una consistencia espesa. Añade una pizca de sal y la esencia de vainilla, revuelve y luego, agrega el coco rallado. Asegúrate de que el coco quede bien distribuído en toda la mezcla.
Cubre el bowl y guárdalo en el refrigerador por dos horas.
Precalienta el horno a 160°C.
Coloca en las bandejas del horno el papel comestible o papel de alumnio. Con una cuchara añade la mezcla de los macaroons en la bandeja del horno, distribuyéndola en pequeños montoncitos. Procura que queden unos tres dedos de separación entre cada monton, pues la mezcla puede expandirse en el horno.
Hornea hasta que tus macaroons se vean dorados. Esto tomará al rededor de unos 15 a 20 minutos. Una vez listos, espera 10 minutos para que se enfríen un poco y se vuelvan más firmes. Luego, déjalos sobre una superficie fría hasta que adquieran una temperatura ambiente. Por lo general, esto tomará aproximadamente 2 horas.
Los macaroons se mantendrán frescos por hasta 5 días si los guardas en un envase hermético.
Si quieres añadirle un poco de picardía a esta receta, puedes agregar a la mezcla chips de chocolate o almendras picadas.