Dato Práctico #60
Las frutas dan un toque de alegrÃa a cualquier mesa, por modesta que ella sea. Su atractivo consiste en su presentación. Deben estar muy limpias, si es posible lustrosas. Combinadas sobre una bandeja formarán un centro de mesa muy atractivo.
Versátil dulce de mandarinas, ideal para postres y helados. Anímate a preparar esta receta, pues es más sencilla de los que crees.
Pela las mandarinas y corta las cárcaras en tiras finas. Luego ponlas a remojar en agua fría. Cambia el agua del remojo 3 veces con intervalos de 1 hora. La última agua hazla hervir y deja que las cárcaras se ablanden, cuela el agua y resérvala.
Limpia las mandarinas quitándoles la parte blanca, las semillas y las telas de los gajos. Pon las cáscaras, la pulpa, el azúcar y 1 litro del agua de cocción en una olla y lleva a cocinar a fuego suave, revolviendo constantemente con una cuchara de madera hasta que espese y sea consistente.
Deja enfriar y envasa en frascos esterilizados y secos, cerrando herméticamente.
Una forma sencilla de esterilizar un frasco para conserva es dejarlo hervir en agua durante uns 5 minutos y dejar secar, otra opción es en un horno a 140ºC durante 15 minutos.